Chica del Peugeot

Si ya sabes que el momento no es lo indicado,
Y que ciertas veces nos equivocamos mas de la cuenta,
Y que el tango no es un buen remedio para no –llorar,
Y que pensar en mundo lleno de paz,
Esta de mas
Y que le sufrimiento ya es parte de tu vida, o de la mía,
Tengo que decirte urgente,
Que ya no puedo mas,
Que se me caen las pupilas,
Que mi frasco de protocolo se ha roto,
Mientras te seguí corriendo con la mirada,
Que tu cascara al fin y al cabo,
Podría ser lo de menos,
Y que lo tuyo esencialmente es destruir cualquier intento por pasar desapercibida,
Lo sabes mejor que yo,
Y que nadie,
Si lo sabes, me tienes que enderezar en este camino pedregoso,
Donde las utopías no me convencen,
Y el estado de derecho me exabrupta,
Y la ideología de turno,
Se ha tomado demasiadas atribuciones conmigo,
Te invito junto a Piazolla,
Y al ritmo frenético de su cumparsita,
Y el de mi teclado, tantas veces mi obligado confesionario,
A perder un momento de tu espiral,
A dejarte llevar por la locura,
Y que nuestras pupilas se dilaten por solo momentos,
Tu ya lo sabes,
No soy otro que yo mismo,
Dentro de un frasco, que deberías abrir,
Y probar el almíbar,
La carne del durazno,
Que germino hace mucho tiempo,
Y espera con ansias ser mordido por tus labios,
Que nunca he visto abiertos,
Mas que en sueños,
De fantasías reprimida.